Alguien me decía que se dio cuenta lo importante que es tener a alguien esperándote en la meta, y que además se dio cuenta que no nacimos para estar solos, esta conversación me hizo reflexionar a cerca de muchas cosas, que en algunos puntos contradicen mi consigna de la individualidad. Él no solo me hablaba de lo que pensaba para si mismo, sino el cómo me veía, cosa que fue muy extraña, escuchar en los labios de otra persona la perspectiva de tu soledad.
Sin dar mayor detalle, para no caer en eso de alimentar mi ego con los elogios, el tipo me hizo darme cuenta de muchas cosas, si bien es cierto que tiene mucha importancia que los amigos y familiares estén en la meta , existe algo mas allá de eso que también es importante, el sentimiento de identificación, conexión, pasión, y pare de contar que puedes tener con ese “alguien” a quien mi amigo se refería. Quizás tenga razón.
En fin, Dios obra de maneras perfectas y va tejiendo redes que te conectan a otras personas, para aprender, amar, madurar, crecer, personas para compartir tu SER y personas para llorar y apreciar lo bueno. Dios pone en tu vida lo que necesitas, lo que no necesitas se lo lleva…así implique algunas lágrimas, que te da el libre albedrío para decidir quienes se quedan en tu vida y con quien compartir tu visión del mundo y tu felicidad… no me preocupa que “alguien” esté en la meta, tengo la certeza de que mi vida es perfecta, y que Dios tiene un plan para cada uno de nosotros..el resto viene solo
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