Emoción, expectativas, full glucógeno, excelente compañía y ganas de correr, así comenzaron mis 13k de montaña hoy, comencé con la promesa de siempre, “Bruja vamos a correr juntas”, a la señal de salida comenzamos a correr, las chicas se adelantaron, yo sentía que el ácido láctico invadía mi humanidad y pensaba “por qué carajo corrí ayer 14,5k”, ni modo, me auto animé y seguí confiando en que mi fuerte siempre han sido las subidas, así que, me mentalice y seguí.
Había corrido mas o menos 3 km, y ya la brujis se veía lejos, llegó un momento en que no la vi más, me quite la franela, el calor era horrible, sin embargo seguía constante, corriendo a lo máximo que me daban mis piernas ( muy lento para decir verdad), de repente en el km 4 experimente una recarga de energía que no se donde diablos salió, lo cierto es que aceleré, y un rato mas adelante estaba una de las subidas más fuertes del recorrido y ahí estaba, la alcancé le di agua y seguí, en ese momento sentía que no podía dejar de correr, las próximas 2 picas fuertes las camine a pasos largos, era imposible correr esa impinación tan fuerte, y me decía a mi misma “vamos que tu puedes, esto no te vencerá”, ya comenzaba a molestarme el camellbag que llevaba en la espalda (el bien llamado muchacho de 3 meses), sentía que hería mi piel entre el roce, el sudor y la tierra…aún así seguí, un poco preocupada por la brujis, sin embargo sentí que los otros compañeros podían proveerle agua en el camino..corrí y corrí, comenzaron las bajadas…odio las bajadas, sentía dolor en las rodillas y tuve que disminuir la velocidad, no dejaba de pensar lo mucho que me incomodaban las bajadas, y de repente me dije “hey! Esto es parte de la ruta, asume tu vaina y sigue sin quejarte”…baje y baje…alternando planos y subidas… pensaba “que ruda esta vaina, y con este sol mas!”, aún así no me detuve, de repente un cartel que decía “10k”, DIOS! Solo faltaban 3 km, corría y sentía que no se terminaba..otro cartel “500mts”…el ½ km mas largo de mi vida, corrí lo mas que pude y llegué en 1´46”30 exactamente, 6min menos que los últimos 10,5km de montaña que corrí, solté el camell, tenía la espalda herida pero definitivamente estaba feliz…a los pocos minuto llegó la brujis…sentí alivio..
En este recorrido reflexione, la vida en una carrera de montaña, comienzas tu ruta con animo, pierdes aliento y tu gete te pasa por el lado diciéndote algunas palabras de aliento y siguen, tú sigues con tu carga en la espalda, lento pero seguro, luego te pasa algo que te anima y sigues con mas energía, corres, caminas, trotas, tomas el ritmo que la vida te dibuja, alcanzas a tus amigos en metas, los dejas atrás, compartes sus alegrías y ellos las tuyas, vienen situaciones difíciles que te hacen ir mas despacio, que te desalientan y te hacen creer que no podrás más, sin embargo sigues, vienen los altos y bajos, aprovechas los odiosos bajos para agarrar impulso y subir sin que nadie pueda detenerte hasta que te encuentras en la recta final de tu meta, para alcanzar eso que quieres, para superar eso que te molesta, y corres, das lo mejor de ti y llegas, sueltas la carga que te hería los hombros y te sientes liberado y triunfador…
Cada situación en tu vida serán 13, 15, 20, 80 km…lo importante es la actitud y el empeño que le pongas a tu camino…
Gracias compañeros de ruta, son mi inspiración..